Las habitaciones son súper cómodas y espaciosas, tienen baños limpios, aire acondicionado y hasta balcones donde puedes relajarte al aire fresco. 🌿

Este hotel ofrece habitaciones acogedoras y cómodas con un baño limpio, balcones y además aire acondicionado. La ubicación del hotel en Macedo de Cavaleiros es tranquila, justo al lado de otras instalaciones🙂👌

Personal muy amable, habitaciones cómodas con un baño limpio, aire acondicionado, balcones.

Las habitaciones tienen baños limpios y aire acondicionado, es un lugar tranquilo cerca de otras instalaciones y de la estación central de autobuses.

Me encantó la ubicación del hotel, muy fácil de encontrar y con buenas conexiones de transporte. Las habitaciones son limpias y cómodas, con sábanas y toallas cambiadas frecuentemente. Además, el personal es amable y atento, siempre dispuesto a ayudar.

El desayuno es un poco caro y de baja calidad.

Las camas y almohadas de la habitación doble eran enormes. El personal era muy amable y me echó una mano con el parking gratis. - Ubicación: el hotel estaba cerca de la estación central de autobuses, también de otras instalaciones. Además, estaba en el centro de la ciudad.

Nuestra estancia en el hotel Marisol fue muy agradable. Nos hospedamos por dos noches y quedamos muy satisfechos. El personal fue muy atento y amable en todo momento. Además, el hotel es bonito y cómodo, con habitaciones de estilo portugués que, aunque antiguas, te permiten descansar tranquilo. La limpieza tanto de las habitaciones como de las zonas comunes fue impecable, y nos cambiaron las sábanas y las toallas durante nuestra estancia. La ubicación del hotel es perfecta, ya que está situado en la carretera nacional 102, carretera vieja a Bragança, lo que nos facilitó el acceso a otras zonas.

100% Recomendable.

Tuvimos un trato muy bueno tanto por los dueños como por la chica que trabaja con ellos en este hotel en Macedo de Cavaleiros. Las habitaciones eran limpias y cómodas, y el desayuno fue delicioso. Además, está muy bien comunicado y situado en la carretera vieja a Braganca. Si volvemos por aquí, sin duda volveremos a este lugar. En general, tuvimos una estancia agradable en el Hotel Marisol.

La única pega fue que las almohadas no eran del todo cómodas, pero aún así pudimos descansar bien.

disfrutamos de unas vacaciones familiares en Macedo de Cavaleiros y nos alojamos en un bonito y cómodo hotel. La limpieza de las habitaciones y las zonas comunes fue excelente. Además, el personal era amable y atento, lo que hizo nuestra estancia aún más agradable. Definitivamente recomendamos Marisol en Macedo de Cavaleiros.

esperábamos más calidad por el precio que pagamos.

El hotel ofrece habitaciones acogedoras y cómodas con baños limpios, aire acondicionado y balcones. La ubicación del hotel en Macedo de Cavaleiros es tranquila y cerca de la estación central de autobuses y otras instalaciones.

El Hotel Marisol en Macedo de Cavaleiros fue una elección excelente. El personal fue muy atento y amable, y la relación calidad-precio fue muy buena. Aunque las habitaciones tenían un estilo portugués antiguo, eran cómodas y limpias. Sin duda, volvería a alojarme aquí.

Los alimentos para el desayuno podrían haber sido mejorados ligeramente, pero en general fue una experiencia satisfactoria.

Las habitaciones del Hotel Marisol son cómodas y acogedoras. La suite tiene un tostador, lo cual es ideal para disfrutar de un desayuno caliente. hay habitaciones con balcón, perfectas para tomar aire fresco. Las habitaciones cuentan con televisores de pantalla plana, así que pudimos ver nuestras series favoritas antes de dormir.

La verdad es que eché de menos que todas las habitaciones tuvieran un sofá.

habitaciones limpias y cómodas, desayuno bueno y bien comunicado.

La limpieza impecable del hotel y la atención del personal. Las habitaciones son cómodas y de estilo portugués.El desayuno es delicioso y el precio es excelente.La ubicación del hotel es conveniente y de fácil acceso.

Todo fue maravilloso.

Las habitaciones tienen un baño privado con bañera o ducha. Una vez que entré en mi habitación, me sentí como si hubiera entrado en un oasis de tranquilidad. El lujoso y relajante baño privado fue como sumergirse en un spa. ¡Fue el escape perfecto después de un día explorando las montañas Bornes!

Desayuno caro.